El Grupo Municipal Socialista pide un Pleno para que Carnero justifique por qué es mejor que Valladolid tenga un alcalde a tiempo parcial. Hasta la fecha el regidor se ha negado a contestar a las preguntas planteadas todos los plenos ordinarios

Transcurrido más de un año desde que Jesús Julio Carnero es alcalde y un año desde que se conoció que también sería senador, el Grupo Municipal Socialista considera ineludible que Carnero dé explicaciones y, en consecuencia, solicita la convocatoria de un Pleno Extraordinario para que “rinda cuentas de su dedicación a la Alcaldía y a la Ciudad de Valladolid”.

Pedro Herrero y los concejales socialistas han registrado el documento mostrado a los medios de comunicación en la Plaza Mayor, delante de la Casa Consistorial por la que el alcalde no pasa todos los días porque tiene que compaginar los dos cargos que él ha elegido a costa de los vecinos de Valladolid. Por cierto, Carnero cobra del Senado y del Ayuntamiento de Valladolid.

Dos refranes ha elegido el portavoz del Grupo Municipal Socialista para ilustrar su discurso: “Dime de qué presumes y te diré de qué careces” y “Quien mucho abarca poco aprieta”. En definitiva, Carnero alardea de algo que no hace, y se dispersa entre Madrid y Valladolid; es evidente que no desempeña sus funciones de forma adecuada, al menos su responsabilidad en la Alcaldía, según subraya Pedro Herrero, quien en todo caso insta al regidor a dar explicaciones a la ciudadanía.

Nada más tomar posesión como Senador Carnero creó un polémico puesto de Coordinador de Políticas Públicas para realizar funciones que anteriormente ejercía un teniente de alcalde, dotado con un sueldo de teniente de alcalde, a la medida de su compañero de partido, ex jefe de gabinete en la Junta de Castilla y León y la Diputación Provincial. Se trata del ya conocido como “alcalde B”, que supone un sobrecoste de 156.762 euros anuales para las arcas públicas. Esta maniobra, lejos de ayudar a cubrir la ausencia del Sr. Carnero o de suponer un revulsivo para la gestión municipal, ha ocasionado un grave trastorno en el seno de la organización, inmersa en la parálisis y la improvisación.

En enero Carnero proclamó: “Cuanto más senador soy, mejor alcalde soy”. Sin embargo, los meses pasan y el alcalde se niega a dar explicaciones ante las preguntas que formula el Grupo Municipal Socialista todos los meses acerca de su actividad en el Senado y de los supuestos beneficios que tiene su puesto en la Cámara Alta para la ciudad de Valladolid.