Luis Vélez lamenta que se vayan a gastar de forma innecesaria 4,5 millones de euros en un edificio abocado a la demolición cuando se construya la nueva infraestructura.

La moción del Grupo Municipal Socialista condensa la propuesta para una infraestructura fundamental de la Ciudad: “Moción para cumplir el PGOU, no despilfarrar 4,5 millones de euros públicos en unas instalaciones que se van a demoler e impulsar la construcción de la nueva estación de autobuses”.

A partir de ahí Luis Vélez ha argumentado la necesidad de acometer una mejora sensata, de adecentamiento de la dotación, pero sin necesidad de realizar una inversión millonaria en un edificio que deberá ser demolido cuando se construya la nueva estación de autobuses en el barrio Delicias.

“El título de la moción refleja claramente nuestra propuesta, que no busca otro objetivo más que defender los intereses públicos y por tanto el de los vallisoletanos.  Hoy hace casi un año, fue en el Pleno del 26 de julio, desde el Grupo Municipal Socialista planteamos a este Pleno una Moción para que la Junta de Castilla y León abordara la dignificación de la actual estación de autobuses.

Las instalaciones de la estación de autobuses estaban y están un año después de aquella moción en una situación de abandono absoluto, sin tareas básicas de mantenimiento durante décadas, con un aspecto deplorable que la convierte en la peor de nuestro país. PP y VOX rechazaron aquella moción, se ve que no era necesaria, o que no querían incomodar a la Junta. Es más, el Sr. alcalde dijo que “Traer este asunto al pleno es delirante”.

Sin embargo, unos meses después, el 15 de abril de este año, el alcalde Valladolid y el presidente de la Junta de Castilla y León firmaron un “protocolo de colaboración entre la Junta de CyL y el Ayuntamiento de Valladolid en materia de transportes públicos terrestres”.

En concreto, el objetivo era “llevar a cabo una ambiciosa reforma de la actual estación de autobuses de Valladolid”. La actuación tiene un coste previsto de 4,5 millones de euros para un edificio que a corto plazo será demolido, pues la construcción de una nueva estación de autobuses en Las Delicias está contemplada en el convenio de integración ferroviaria (2017).

Con esta declaración de intenciones, que es lo que es un Protocolo, la Junta no resuelve el problema de la estación actual, generando dos problemas nuevos:

• El primero de ellos es que una reforma del calado que se plantea contraviene el vigente PGOU de Valladolid, tal y como el mismo concejal de Urbanismo y Vivienda advirtió al Pleno hace un año. Considerando que, de acuerdo con el PGOU, la estación de autobuses está declarada expresamente fuera de ordenación, señala expresamente que “solo se podrán acometer las reparaciones estrictamente exigibles para asegurar la seguridad, la salubridad y el ornato de las construcciones e instalaciones”.

• El segundo problema es el despilfarro de 4,5 millones de euros en unas dependencias condenadas a la demolición en el corto plazo.

El Ayuntamiento debe evitar que se lleve a cabo este despilfarro de dinero público, 4,5 millones de euros que se van a tirar a la basura al tener que demoler las instalaciones, y por otra parte, debe instar a la Junta a que impulse la construcción de la nueva estación de autobuses.

El convenio de integración recoge que la terminal de autobuses estará ubicada a continuación de la de ferrocarril, “en una parcela de los antiguos talleres de Renfe, con un coste de 28,6 M € que financiará la Sociedad Alta Velocidad”.

Estos terrenos, actualmente, continúan siendo propiedad de RENFE, puesto que no puede cederlos a la Sociedad Valladolid Alta Velocidad hasta que el Ayuntamiento entregue a RENFE y a ADIF los terrenos donde se asientan los nuevos talleres.

Por cierto, trámite este que depende únicamente del Ayto, sobre el que ADIF y RENFE ya dieron la confirmación al Ayuntamiento y que sigue a la espera de que se materialice la cesión.

El concejal de Urbanismo en la Comisión del 11 de junio anunció que “irá la cesión de los terrenos del nuevo complejo ferroviario a la Junta de Gobierno de la siguiente semana”. Casi dos meses después, aún no lo han aprobado. Y ahora, sin fecha prevista, porque “hay otras prioridades, no hay prisa”.

En la Comisión del 11 de junio, el concejal de Urbanismo y Vivienda dijo que RENFE dio el visto bueno a la propuesta el 17 de abril de 2024 y ADIF el 24 de mayo de 2024. Por ello, anunció que “irá a la próxima junta de gobierno, es decir, el 17 de junio”.

En todo caso , aunque la nueva estación la construya la SVAV, le corresponde a la Junta definir las características y necesidades de las nuevas instalaciones.

Luis Vélez ha recordado las palabras del concejal de Urbanismo en el Pleno celebrado hace un año. Ignacio Zarandona afirmó que la mejora que planteaba el Grupo Municipal Socialista “urbanísticamente es disconforme con el planeamiento: en el PGOU se le atribuye un uso residencial” . El Plan General -añadió- “imposibilita modificaciones sustanciales de la propia estación. Simplemente permitiría unos mantenimientos (art. 503)”  .

El Grupo Municipal Socialista ha planteado dos acuerdos sencillos y razonables, que , sin embargo, han sido rechazados por PP y Vox:

Para que acometa las medidas urgentes necesarias que dignifiquen de forma urgente las instalaciones de la actual estación de autobuses, evitando despilfarrar 4,5 millones de euros en unas instalaciones que se van a demoler. 

Y que lleve a cabo los trabajos técnicos necesarios de tal forma que la SVAV pueda licitar la redacción del proyecto constructivo de la nueva estación de autobuses. 

 La realidad es que a fecha de hoy, 29 de julio de 2024, la estación de autobuses sigue agonizando ante la negligencia de la Junta de Castilla y León consentida por PP y Vox en el Ayuntamiento de Valladolid.